Muchas personas creen que visitar al cardiólogo solo es necesario después de un diagnóstico, pero lo cierto es que la prevención es la mejor herramienta para cuidar la salud del corazón. Si tienes factores de riesgo como hipertensión, colesterol elevado, diabetes, sobrepeso, tabaquismo o antecedentes familiares de infarto, una evaluación temprana puede marcar la diferencia.
Un cardiólogo puede detectar alteraciones antes de que se presenten síntomas graves y recomendar cambios en el estilo de vida, medicamentos o pruebas diagnósticas para proteger tu salud. Incluso si te sientes bien, una visita preventiva puede evitar complicaciones futuras. En CENICARDIO recomendamos acudir a chequeos periódicos, especialmente a partir de los 40 años o antes si existen factores de riesgo.
Fuente: American Heart Association (AHA).
También es importante acudir al cardiólogo si presentas síntomas como dolor en el pecho, falta de aire, palpitaciones, mareos o hinchazón en las piernas. Estos signos pueden indicar problemas en el corazón o en los vasos sanguíneos que requieren atención inmediata.
Incluso si no tienes síntomas, se recomienda realizar una evaluación preventiva a partir de los 40 años, o antes si tienes factores de riesgo. La medicina preventiva salva vidas y mejora la calidad de vida.
Un chequeo regular puede marcar la diferencia entre descubrir un problema a tiempo o enfrentarse a complicaciones graves. En CENICARDIO, contamos con especialistas en cardiología y neurocardiología listos para acompañarte en cada etapa de tu cuidado.


